Lao Tse dijo:

Cuando los sabios establecen la educación y ejecutan políticas, deben observar el final y el comienzo y ver los beneficios creados. Cuando la gente sabe escribir, su virtud se deteriora. Cuando conoce el cálculo, su benevolencia se deteriora. Cuando sabe contratar, se deteriora su confianza. Cuando conoce las máquinas, se deteriora su estado esencial.

Un laúd no produce ningún sonido, pero sus veinticinco cuerdas resuenan a través de él; un eje no da vueltas en sí mismo, pero los treinta radios de una rueda giran en virtud de su poder. Las cuerdas de un laúd deben tener un equilibrio de relajación y tensión para producir un tono. Un carro necesita un equilibrio de trabajo y descanso para que pueda llegar lejos. Lo que permite que haya sonido no tiene en sí mismo sonido; lo que hace que sea posible el giro en sí mismo no gira.

Gobernantes y gobernados caminan por diferentes senderos; lo que es fácil de gobernar pierde rápidamente el orden. Aquellos que poseen un rango elevado y cuyo sendero es grande son seguidos; aquellos cuyo trabajo es importante pero cuyo sendero es pequeño son desafortunados. La pequeña virtud estropea la justicia, la pequeña bondad estropea el Camino, el pequeño intelectualismo estropea al gobierno.

La severidad cruel daña la virtud. La gran rectitud no es amenazante, de manera que el pueblo es fácil de dirigir. El gobierno perfecto es tolerante, así las clases inferiores no roban. La lealtad perfecta retorna a la simplicidad, así el pueblo no tiene hipocresía.