1. Si tiene más de 50 años , sepa cómo romper con el pasado.
Después de los 50 años, si quieres vivir una vida feliz, debes romper con el pasado.
Corta la relación con tu posición pasada, sirve honestamente a los ancestros; mantén una distancia con las personas que no pueden llevarse bien con el pasado, corta la relación con las cosas desagradables del pasado y limpia tu estado de ánimo.
Comprende qué edad hace qué y cuándo decir algo. Solo de esta manera podemos cruzar la frontera, no valientes, no tristes, y entrar en nuestro propio mundo del Taiji.
2. No pases la vida comiendo té o arroz.
La existencia de presión arterial alta, acumulación de grasa en la sangre, azúcar alta en la sangre y el ácido úrico alto hacen que muchos amigos mayores piensen que el “té crudo y el arroz ligero” es la única solución positiva para la salud y la longevidad. Al comer solo verduras y no carne, puede vivir más tiempo y estar menos enfermo. Pero, de hecho, una dieta verdaderamente saludable no necesariamente requiere té espeso y comidas ligeras, sino que también es una buena opción para seguir practicando Taiji.
3. Comprende que no vives demasiado en serio.
Hay un dicho clásico que mucha gente debe haber escuchado: en serio, pierdes.
A esta edad, para algunas personas y algunas cosas en la vida, debe mirar hacia otro lado y cerrar un ojo. Las cosas que no violan los principios, no tienen que ser ciertas. Hay demasiada fama y títulos, no tienes que luchar por ella. A esta edad, no importa cuántas clasificaciones tengas, no puedes comparar con estar confundido y vivir felizmente.
4. Aprende a ser un espectador tranquilo.
Cuando eres mayor, ya no tienes energía ilimitada y no necesitas competir contra el tiempo, es mejor ser un espectador tranquilo, reducir la velocidad, calmarte, escuchar el sonido de las flores que florecen y sentir lo hermoso que es vivir.
Cuando seas mayor, sé un espectador tranquilo, aprende a escuchar, mirar y dejar que todo fluya. Aunque su propia experiencia y conocimientos son muchos o buenos, no son necesariamente adecuados para los jóvenes, por lo que solo puede dar consejos, no dar órdenes. Siempre ten en cuenta la posición como espectador, para que no te excedas y te preocupes por ti mismo.
5. Puede desear trabajar por su propia felicidad.
Cuando una persona es mayor, tiene que hacer algo, si quiere estar ocupado, vivirá feliz.
De hecho, estudiar, trabajar, practicar Taiji, cuidar de los nietos si se tiene, plantar flores y vegetales, etc., son actividades que si las escoge voluntariamente están trabajando para su propia felicidad. De esta manera, recuperaremos algo de felicidad en nuestros años posteriores, y también tendremos una cálida compañía.
6. La persona que debería preocuparse más soy yo.
En esta vida, la persona por la que más nos lamentamos es en realidad nosotros mismos.
No es fácil pensar en los días pasados, para la familia y la vida, tener que complacer a los demás y complacer a los demás a cambio de la vida que deseas.
7. Elegir amigos es muy importante, especialmente los viejos amigos.
Un confidente es difícil de encontrar, un amigo cercano es difícil de encontrar y un viejo amigo es difícil de encontrar. A esta edad, debemos apreciar a los viejos amigos que nos rodean, incluso a esos viejos compañeros de clase, viejos camaradas y viejos colegas que aún se mantienen en contacto, así como a los boxeadores que siempre están a nuestro lado. La vida se volverá más rica gracias a ellos. Más interesante.
8. Recuerda que cuando el corazón es joven, no es nada ser mayor.
La gente siempre envejece, esto es un hecho y una ley objetiva. Pero si el corazón es joven, solo la edad será vieja. Lo que no es viejo es el espíritu, el temperamento y el encanto.
Las personas mayores de sesenta años, deben tener una buena actitud, alegre y optimista, indiferente y de mente abierta. Tener una mentalidad joven, no suspirar por los viejos, no estar triste por el otoño, 50 años pero mentalidad de 30 años. ¡No se preocupe por la vejez, lo joven está en nuestros corazones, los días están mejorando!
Busquen lo bello de la vida en cada etapa, por supuesto también en la vejez.